El blanco se ha convertido en el color del pelaje más asociado con los persas, aunque pueden venir en una variedad de otros colores y patrones. Sus pelajes largos y densos requieren un mantenimiento bastante alto y requieren un cepillado diario para eliminar los enredos. Los persas son generalmente gatos dulces y tranquilos que prefieren entornos tranquilos y predecibles.
En el caso del gato persa blanco, el color de su manto está asociado a la presencia del gen W dominante, que oculta todos los demás genes de color y patrón de la capa en la composición genética del gato, lo que resultará en un pelaje blanco.
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| Un gato persa blanco de ojos amarillos y denso pelaje. |
Para obtener gatos persas blancos, por lo menos uno de sus padres deben serlo. El color de sus ojos puede variar desde los azules, amarillos, verdes o pardos. Cabe recordar que en los gatos persas blancos que poseen ojos azules, tienen predisposición a presentar sordera, en este caso es necesario que el veterinario realice un chequeo a tu gato para descartar tal problema.
Si el gato persa blanco resultara ser sordo ten en cuenta que debes comunicarte con signos visuales en lugar de verbales. En gatos completamente sordo o parcialmente sordos, evita en todo momento que salga de casa, porque, al tener su sentido de la audición comprometido les resultara mas difícil defenderse de lo peligros y potenciales depredadores.
Se creía hasta hace relativamente poco que los gatos blancos sordos siempre tienen los ojos azules, pero se ha demostrado que también hay gatos blancos de ojos verdes o ámbar que presentan sordera.
Es habitual que muchos gatos blancos sean albinos, una condición genética que provoca una falta completa de pigmentación del color en la piel, el pelaje y los ojos. Para determinar si un gato blanco es albino se debe observar varias características entre ellas el color de los ojos. Los gatos blancos normales tienen un amplia gama de colores de ojos, mientras que los gatos blanco albinos tienen a menudo ojos que se ven de un azul muy pálido. Otro rasgo a tener en cuenta es si el gato blanco tiene manchas en el pelaje, pues los gatos albinos nunca las tienen; son completamente blancos. Los gatos albinos tienen la piel rosada y sin nada de pigmentación (esto se verá especialmente bien en los párpados, la nariz, las almohadillas de las patas y los labios), mientras que los gatos blancos normales pueden tener la piel pigmentada o alguna mancha o lunar. no obstante para estar seguros de si el gato es albino o no, es necesario acudir a un veterianrio para que le realice un estudio genetico.
